Esta vivienda se desarrolla en una urbanización situada en el macizo recoso del Garraf, en la costa del Mediterráneo catalán. En una parcela de fuerte pendiente y marcada por una estricta normativa de alturas, el objetivo perseguido es el de introducir las espectaculares vistas en el interior de la vivienda.   La casa se configura como una nítida combinación de volúmenes abiertos al mar dispuestos en voladizo, contrarios a la pendiente natural del terreno. Revestida de blanco, la vivienda se perfila con una geometría elemental cuyo recurso expresivo se basa en la contundencia de los huecos que rasgan dos de sus fachadas. De los tres cuerpos con cubierta plana el mayor ocupa el nivel intermedio. Se trata de un gran prisma regular y compacto que alberga el vestíbulo, el salón-comedor y la cocina, orientados al espectacular paisaje, además de una habitación para invitados, en la parte trasera de la parcela, que se abre mediante una cristalera a las buenas vistas del oeste. A partir de este nivel una escalera conecta con la planta superior, donde se sitúa, a modo de excepcional mirador, un pequeño estudio. En la parte inferior se ubican tres dormitorios más, dos cuartos de baño y un amplio porche.   En la fachada de la calle, orientada al norte, la rotundidad volumétrica queda suavizada: sólo se muestra el cuerpo opaco, leve y discreto, del estudio, precedido por el murete que acompaña el recorrido de la rampa hacia la puerta. Es en nivel intermedio donde el proyecto ha respondido de manera más intensa a los deseos de los propietarios, cuyo objetivo era disfrutar de una “casa-mirador”. Y es que a la visión del mar y los pinares que ofrecen los ventanales corridos de las fachadas sur y oeste, se suma el disfrute de una naturaleza más controlada e íntima, proporcionada por un patio que separa la cocina del estar-comedor. Con tres de sus frentes acristalados, este ámbito no solo no interrumpe la conexión visual de ambas estancias, sino que incorpora una nueva referencia del exterior, haciendo que el interior de la casa se apropie aún más de la naturaleza.

detalle: Proyecto Básico, Proyecto Ejecutivo y Dirección de Obra
autores: Lluís Jubert y Eugènia Santacana
emplazamiento: Urb. Garraf Park, Garraf. Barcelona
promotores: Josep Santacana y Olga Ramírez
constructor: Renové Condal S.L.

 

estructuras: Eduard Bosch y Oriol Bosch
mediciones y pressupost: Lluís Roig
arquitectura técnica d.o.: Lluís Roig
fotografía: Eugeni Pons

 

año proyecto: 1997
año construcción: 2001
nº de visado: 97008170
data c.f.o.: 12 de marzo 2001
sup construida: 272,74 m²
presupuesto: 174.527,90 € (PEC sin iva)

Esta vivienda se desarrolla en una urbanización situada en el macizo recoso del Garraf, en la costa del Mediterráneo catalán. En una parcela de fuerte pendiente y marcada por una estricta normativa de alturas, el objetivo perseguido es el de introducir las espectaculares vistas en el interior de la vivienda.   La casa se configura como una nítida combinación de volúmenes abiertos al mar dispuestos en voladizo, contrarios a la pendiente natural del terreno. Revestida de blanco, la vivienda se perfila con una geometría elemental cuyo recurso expresivo se basa en la contundencia de los huecos que rasgan dos de sus fachadas. De los tres cuerpos con cubierta plana el mayor ocupa el nivel intermedio. Se trata de un gran prisma regular y compacto que alberga el vestíbulo, el salón-comedor y la cocina, orientados al espectacular paisaje, además de una habitación para invitados, en la parte trasera de la parcela, que se abre mediante una cristalera a las buenas vistas del oeste. A partir de este nivel una escalera conecta con la planta superior, donde se sitúa, a modo de excepcional mirador, un pequeño estudio. En la parte inferior se ubican tres dormitorios más, dos cuartos de baño y un amplio porche.   En la fachada de la calle, orientada al norte, la rotundidad volumétrica queda suavizada: sólo se muestra el cuerpo opaco, leve y discreto, del estudio, precedido por el murete que acompaña el recorrido de la rampa hacia la puerta. Es en nivel intermedio donde el proyecto ha respondido de manera más intensa a los deseos de los propietarios, cuyo objetivo era disfrutar de una “casa-mirador”. Y es que a la visión del mar y los pinares que ofrecen los ventanales corridos de las fachadas sur y oeste, se suma el disfrute de una naturaleza más controlada e íntima, proporcionada por un patio que separa la cocina del estar-comedor. Con tres de sus frentes acristalados, este ámbito no solo no interrumpe la conexión visual de ambas estancias, sino que incorpora una nueva referencia del exterior, haciendo que el interior de la casa se apropie aún más de la naturaleza.
casa garraf
Esta vivienda se desarrolla en una urbanización situada en el macizo recoso del Garraf, en la costa del Mediterráneo catalán. En una parcela de fuerte pendiente y marcada por una estricta normativa de alturas, el objetivo perseguido es el de introducir las espectaculares vistas en el interior de la vivienda.   La casa se configura como una nítida combinación de volúmenes abiertos al mar dispuestos en voladizo, contrarios a la pendiente natural del terreno. Revestida de blanco, la vivienda se perfila con una geometría elemental cuyo recurso expresivo se basa en la contundencia de los huecos que rasgan dos de sus fachadas. De los tres cuerpos con cubierta plana el mayor ocupa el nivel intermedio. Se trata de un gran prisma regular y compacto que alberga el vestíbulo, el salón-comedor y la cocina, orientados al espectacular paisaje, además de una habitación para invitados, en la parte trasera de la parcela, que se abre mediante una cristalera a las buenas vistas del oeste. A partir de este nivel una escalera conecta con la planta superior, donde se sitúa, a modo de excepcional mirador, un pequeño estudio. En la parte inferior se ubican tres dormitorios más, dos cuartos de baño y un amplio porche.   En la fachada de la calle, orientada al norte, la rotundidad volumétrica queda suavizada: sólo se muestra el cuerpo opaco, leve y discreto, del estudio, precedido por el murete que acompaña el recorrido de la rampa hacia la puerta. Es en nivel intermedio donde el proyecto ha respondido de manera más intensa a los deseos de los propietarios, cuyo objetivo era disfrutar de una “casa-mirador”. Y es que a la visión del mar y los pinares que ofrecen los ventanales corridos de las fachadas sur y oeste, se suma el disfrute de una naturaleza más controlada e íntima, proporcionada por un patio que separa la cocina del estar-comedor. Con tres de sus frentes acristalados, este ámbito no solo no interrumpe la conexión visual de ambas estancias, sino que incorpora una nueva referencia del exterior, haciendo que el interior de la casa se apropie aún más de la naturaleza.

detalle: Proyecto Básico, Proyecto Ejecutivo y Dirección de Obra
autores: Lluís Jubert y Eugènia Santacana
emplazamiento: Urb. Garraf Park, Garraf. Barcelona
promotores: Josep Santacana y Olga Ramírez
constructor: Renové Condal S.L.

 

estructuras: Eduard Bosch y Oriol Bosch
mediciones y pressupost: Lluís Roig
arquitectura técnica d.o.: Lluís Roig
fotografía: Eugeni Pons

 

año proyecto: 1997
año construcción: 2001
nº de visado: 97008170
data c.f.o.: 12 de marzo 2001
sup construida: 272,74 m²
presupuesto: 174.527,90 € (PEC sin iva)